La Profesora Me Hizo Suya En Su Oficina
Categorías: Lesbianas Sexo Oral Dominación y Sumisión Consentida
Desde el primer día de clases, la profesora Rivas me tuvo nerviosa. No solo por su mirada firme o su forma de hablar, sino porque había algo en ella... una energía dominante que me hacía mojar la ropa interior con solo verla escribir en la pizarra. Tenía unos 38 años, cabello oscuro recogido, gafas, y un cuerpo elegante pero explosivo bajo la ropa formal. Yo era nueva en la facultad, tímida, y sentía que ella lo notaba todo.
Una tarde, después de clases, me llamó a su oficina. Cerró la puerta y bajó la persiana. “He notado cómo me miras, Marisol…” dijo mientras se acercaba a mi escritorio. Yo tragué saliva. “No tienes por qué fingir que no deseas que te toque.” Me quedé en silencio, temblando. Ella se agachó frente a mí, levantó mi falda y me bajó las bragas. “Estás empapada.”
Metió su lengua entre mis labios sin más. Gemí fuerte, con las piernas temblando. Me sujetó con firmeza por los muslos y comenzó a chuparme como si supiera exactamente lo que hacía, deteniéndose solo para mirar mi cara de placer. “No vas a correrte aún… solo cuando yo lo diga.” Me subió al escritorio, se quitó la blusa, dejando ver un sujetador negro que dejaba sus pechos medio expuestos. “Ahora tú me lames, como una buena alumna.”
Me arrodillé, le abrí el pantalón y le metí la cara entre las piernas. Gemía y jadeaba mientras yo la besaba con torpeza al principio… hasta que aprendí lo que le gustaba. Se vino gritando mi nombre. Me besó con su sabor en mis labios y susurró: “Felicidades, pasaste con honores. Pero esto… apenas comienza.”