La Noche Que Nos Perdimos Entre Hermanos y Amiga
Categorías: Tríos Incesto Ficticio Fantasías Sexuales
Siempre hubo una tensión que nadie se atrevía a nombrar entre nosotros tres: mi hermano mayor, nuestra amiga Anabella y yo. Vivíamos juntos en un apartamento durante el verano, compartiendo risas, secretos y miradas cargadas de deseo. Una noche, después de beber demasiado, las barreras se rompieron.
Anabella se acercó a mí y me susurró al oído: “¿Quieres jugar con nosotros?” No pude resistir. Mi hermano se unió, y pronto estábamos desnudos, explorándonos con ansias y sin pudor. Me monté sobre Anabella mientras mi hermano me penetraba por detrás. Las caricias, los gemidos, las lenguas y los dedos se mezclaban en un torbellino de placer incontrolable.
Nos corrimos juntos, exhaustos y satisfechos, sabiendo que habíamos cruzado una línea invisible, pero imposible de ignorar. Desde esa noche, la amistad cambió para siempre.